Garra, mística y coraje: Universitario rescató un punto de oro ante Goiás

Cuando todo se venía encima, Universitario de Deportes apeló a su rica historia para igualar un cotejo que venía en completa contra. Acabada la segunda fecha de Sudamericana, continuamos punteros y con el sueño copero latente.

Con el trajín de las victorias difíciles de las últimas dos semanas, Universitario recibió a Goiás de Brasil en un Monumental abarrotado por más de cincuenta mil almas que fueron uno solo con el equipo.

No podía haber sido de otra forma, ya que el marco de público motivó al futbolista a seguir dándolo todo. El desgaste físico de casi el noventa por ciento de la oncena titular recurrente era evidente. Uno de los pocos cuestionamientos que se le podría señalar a don Jorge Fossati: la falta de rotación en determinadas zonas.

A pesar de conservar el cero hasta el entretiempo, el peso en mención se vio reflejado en el 0 – 2 momentáneo en la segunda mitad.

El resultado reflejaba la poca claridad que se tuvo en todas las zonas. Pérdida de marca de la zaga en el primer gol, lo mismo con complicidad del arquero en el segundo gol, y la falta de un hilo conductor de la mitad para adelante evidenciaban que se jugaba, quizás, el partido menos vistoso de la era Fossati.

Pero ojo, estamos hablando de la era Fossati. El maestro uruguayo encontró en las variantes el replanteo exacto para pausar el crecimiento del rival y jugar con compromiso hasta el final, independientemente de cuál sea el resultado.

Sin temor de recibir más goles, todos los cambios fueron de ataque. Ese hecho demuestra la actitud de un técnico que transmite seguridad y firmeza a su oncena, quienes a pesar de todo continuaban siempre hacia adelante.

Con ese empuje que nuestra propia historia ha bautizado como GARRA es que terminamos remontando un resultado adverso a un punto valioso. Un empate con sabor a victoria.

En menos de diez minutos, William Riveros anotó el descuento que no es más que un aviso a Goiás y a cualquier rival. Se iba escribiendo, otra vez, la maravillosa y exacta frase de que nunca podrás dar por muerto a Universitario.

Las tribunas eran mareas de creyentes parados esperando el empate. Igualdad que en la última del partido puso Álex Valera con un potente cabezazo tras buen centro de Polo. Abrazos, saltos, gritos y llantos se vivieron en el “Templo” y a lo largo y ancho de todo el país.

Todos cabeceamos junto con Álex. Universitario empataba un partido prácticamente perdido ante un Goiás que fue un gran dolor de cabeza a lo largo del encuentro. La “U” volvía a sacar cara por el Perú.

(VIDEO: CONMEBOL Sudamericana)

Cuando no se puede con fútbol…

Han pasado poco más de doce horas después de la mágica noche de ayer en el empate ante Goiás. Y un resultado así, producto de la garra crema, tiene que ver también con el fútbol.

Así como sería insensato inflar el desempeño de la “U” que claramente no tuvo su mejor partido, sería aún más mezquino no enervarse por ver cómo, cuando no se podía con fútbol, nuestro equipo sacó la actitud necesaria para empaparse de una garra que solo emana de la propia historia.

La capacidad de respuesta es lo más rescatable de anoche. Universitario ha recuperado su identidad, y los jugadores son conscientes de ello.

En unos días probablemente se pueda continuar viendo la mano de Fossati, tal vez contra Cristal o ante Sport Boys por Liga 1, y ya será oportunidad de continuar observando constructivamente el crecimiento del equipo ya en aspectos más futbolísticos. Sus mejorías, aciertos y desaciertos.

Hoy por hoy, por qué no quedarnos con esa ilusión que sin duda alguna nos sigue colocando en lo más alto del fútbol peruano. Sin rachas negativas, sin papelones internacionales, y siempre siendo el único que en todo momento defiende el honor del Perú.

Ir arriba
Abrir chat
Consultas aquí!